Shadow of the Colossus (remasters, remakes)

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Redactado por Jesulink
31 de Enero de 2018 sobre las 15:35

Cuando se anunció la remasterización de Shadow of the colossus para PS4 realicé un breve comentario sobre que tenía sentimientos encontrados porque por una parte siempre me hace ilusión ver que buenos juegos vuelven con un apartado visual renovado, pero que por otra, siempre conservo ese miedo a que las versiones originales puedan llegar a caer en el olvido.

Desde ese día estuve dándole vueltas al tema en diferentes ocasiones... No sé si es por ser coleccionista, por llevar casi tres décadas en esto de los videojuegos o por una mezcla de todo, pero no creo que a estas alturas pueda quitarme de encima la perspectiva romántica que tengo de este mundillo.

Hace unos meses, Jim Ryan (por entonces jefe de ventas globales en Sony Europa y recientemente ascendido a vicepresidente de la compañía) hizo unas declaraciones que a muchos nos tocaron la retro-fibra:

Jim Ryan, Sony Europa: "[...] Recientemente estuvimos en un evento de Gran Turismo donde había juegos de PlayStation, PS2, PS3 y PS4, y los juegos de PS1 y PS2 parecerían antiguos. ¿Por qué alguien querría jugar a esto?". [fuente]

Este comentario surgió a raíz de un dato que daba sobre que la retrocompatibilidad era más demandada que utilizada en la práctica. Leyendo esas palabras tal cual, lo que yo percibí es un menosprecio generalizado a un juego con aspecto "antiguo" por el hecho de serlo (y no me meto ahí, cada uno con sus gustos).

Aunque puedo ser obvio diciendo que un buen juego es un buen juego por antiguo que se vea, en realidad me asalta la duda de cuánto peso tiene el aspecto original respecto a la autenticidad del contenido en sí mismo, y de qué pasaría con los grandes juegos de la primera generación 3D si de un día para otro todos fueran remasterizados siguiendo una línea evolutiva artística coherente respecto de sus originales. Lo digo porque tengo la sensación de que serían aceptados con los brazos abiertos en su gran mayoría.

Siendo sincero, al final, me gusta ver algo que aprecio renovado y mejorado. No puedo negarlo. Las sensaciones son buenas y me quedo con eso. Si renuevas siguiendo el rumbo de la esencia, es difícil no cautivar.

En mi opinión, este nuevo Shadow of the Colossus tiene eso. Creo que es una renovación hecha con tacto y a falta de jugarlo, diría que no ha perdido un ápice de espíritu. Ver ese vídeo hace que me interese por cada detalle y además, que me imagine cómo sería una remaster del estilo de otros títulos que aprecio y que no la tienen.

La verdad es que bien pensado, los originales siempre estarán ahí. Todos ellos. Siempre estarán ahí para demostrar lo que hicieron en su época y algunos los conservaremos para poder seguir mostrándolo a las nuevas generaciones.

Creo que se habla bastante de "remasters sí / remasters no", pero creo que no está de más comentar cuándo sí, cuando no, por qué sí, por qué no, en qué juego sí o de qué forma o para conseguir qué. Y que conste que no estoy hablando de temas (también interesantes) como el uso de remasters para rellenar catálogo cuando no hay novedades, reediciones como forma de negocio, etc. No trato estos temas en esta reflexión y creo que se entiende.

La verdad es que esta versión de Shadow of the colossus se ve muy bonita. Me gusta. Y curiosamente me ha pasado algo. Sin duda, cuando no revisamos constantemente una obra, con el paso del tiempo, tendemos a olvidar los detalles y formamos recuerdos adornados. Ahora el original me parece más viejo de lo que me parecía antes. Y eso... también me gusta.

Categoría: Videojuegos

Hay 1 comentarios

1 alverno comenta:

Vivimos en la época de la monetización de la nostalgia.
A dia de hoy series como por ejemplo Stranger Things o el regreso de películas como IT pretenden aprovechar la añoranza de una generación que acaba de dejar de ser joven y empieza a ser madura. Es una nostalgia falsa y del economato que apela a nuestros recuerdos de infancia y magnifíca aquello que nos es querido y lo distorsiona a través del prisma del marketing

Los aficionados al mundo de los videojuegos llevan enfrascados en esta pseudonostalgia mediante los remakes desde mucho antes de que Netflix entrase en nuestras casas ofreciendonos series de televisión basadas en los tebeos de nuestra niñez.

La retrocompatibilidad tiene su razón de ser. El gamer no deja de ser gamer del dia a la mañana. No se levanta un dia y dice: A la mierda los videojuegos, voy a dedicarme a leer a Schopenhauer (cosa que como licenciado en Filosofía no os recomiendo porque el tio era un capullo)
Aquel al que le gustan los videojuegos le van a seguir gustando a los 20, 30 y 40. Podrá dedicarle mas o menos tiempo pero si puede echarle mano a una consola va a querer disfrutar de los últimos juegos del momento. Pero del mismo modo va a echar la vista atras con añoranza y recordar que todo tiempo pasado fué mejor. Somos animales emotívos, va en el genoma. Es por eso que siempre agradecemos que salgan para las consolas de nueva generación revisiones de los juegos que nos hicieron vibrar en los tiempos mozos.

Es un hecho. Todos tenemos alguno juego que nos apetece rejugar en alguna época de año o momento especial. Un Final Fantasy, tal vez una aventura gráfica de Lucas Arts, quizás echar unas ficticias monedas al Metal Slug. Nos gusta regodearnos en el pasado. Y nos gusta compartir con las nuevas generaciones lo buenos que eran los juegos que nos dieron tan buenos momentos en el pasado. Es por eso que los remakes y el anhelo de la retrocompatibilidad son algo que la industria del videojuego va a tratar de explotar en la medida que le sea posible.

Los remakes llegarán. Eso es algo inevitable. En nuestras manos está juzgarlos una vez se materialicen esos proyectos y valorar si realmente el resultado merece la pena o si pese al paso del tiempo buscaremos entre nuestras estanterías el producto original para echar una última partida ;)

31 de Enero de 2018 sobre las 20:09

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